sexta-feira, 6 de janeiro de 2012

Abro espaço para divulgar o trabalho do poeta Manuel Gonzalez Alvarez, de Madri, Espanha, poetamigo do Grupo de Poetas Livres, de Florianópolis. Os poemas de Manuel são publicados na Revista Ventos do Sul e este conto,em particular, chamou-me a atenção, quando o menino(Manuel) descobre de repente que não é mais criança. Manuel é diretor do Grupo Ritus Senior, que apresenta poemas, música e teatro.


    MI  ÚTIMA NOCHE DE REYES



            Empieza este cuento como empezara aquel famoso de Pedro de Alarcón .

            ¡Hace muchos años …¡ Bueno ,tantos , como que yo tenía siete ! -Lo recuerdo como si fuese ahora mismo - Aquella tarde  había  terminado mis  juegos antes de costumbre . No sé el motivo pero todo el día lo había pasado muy nervioso, bueno si sabía el por qué .

            Aquella noche , era la " Noche de Reyes " y eso me hacía  vibrar.

            Mi madre me lo notó. Yo hacía preguntas . Tenía  mis dudas. Trataba de no hacerme ideas , ni hacer caso  a lo que los demás chicos más mayores me habían contado .

            Y es que ya tenía mal concepto de la gente , por cierto que de mayor la sigo teniendo .

            La humanidad miente mucho .

            No obstante , como digo , aquella tarde tenía mis dudas . Eran muchas casualidades , tantos paquetes , los bazares que estaban tan llenos , los millares de papeles multicolores  que pasaban por mi vista , y aquellos caballotes de cartón , que por muy envueltos que venían , no se podian disimular .

            ¡ Eran muchas novedades para mi imaginación !

            No sé , con mis dudas y todo , seguí luchando entre la verdad y la mentira.

            Más tarde , y siguiendo los consejos  de mi madre , aquella noche  yo me acostaría temprano - como todos los niños - pues si no , los Reyes no vendrían.

             Antes os diré que dejé mi alpargata en la ventana .¡ Sí … mi alpargata !

            Yo era un niño pobre de los de antes , y estos niños no gastabamos zapatos .

            No dormí , creo que no dormí en toda la noche , si alguna vez me quedé traspuesto , fue para soñar .

            ¡ Soñaba ya la madrugada , con aquella carretilla de madera y el fusil  de hojalata con la culata colorada!!

            No sé cuanto tiempo había pasado , pero bien recuerdo que un golpe me hizo que abriera los ojos  en la oscuridad . ¡ Fue un ruido y no de camellos !

            Algo se cayó , luego voces , mi corto entendimiento , por un momento  creyó que sería mi Rey  , pero luego comprendí que era otro  rey .¡ Bien conocí su voz ! Mi madre hizo una exclamación  ¡Oh ! Es la luna que se ha roto , Pero ¿ De que luna hablaban ?,

            Vueltas y más vueltas , sueños interrumpidos  con los que tenían que venir de Oriente. Más voces , ahora es mi hermano que habla , creo que soñaba .       Su voz aclaró más mis dudas. Escuché estas palabras .- Para mi ya no hay Reyes - lo ha dicho papá- ¡ Yo ya soy grande !

            La madrugada puso punto final para aquella noche de pesadillas . Tan pronto como se hizo de día salté de  la cama .

            ¡ Todo estaba aclarado ! ¡ Yo también era grande !

            El costurero de mi hermana  con el espejo roto , fué  quien  le dió  la última puñalada  a mi niñez .

            Sí … es verdad , allí estaba  mi fusíl y mi carretilla . Creo que el Rey fue hasta generoso aquel día , pues me dejó algo más que lo que yo le pedí .

            Lo tomé todo con un llanto nervioso , que sólo yo sabía de que era .

            Mis padres ¡ Que poco conocieron aquel dia la psicología del niño !

            Ya que yo no lloraba con ese llanto propio que da la emoción ,

            Si no, por comprender para siempre , que aquella noche era para mí
           
            " La última Noche de Reyes ".



Manuel Gonzalez Alvarez, director do Grupo Rictus Senior, Madri, Espanha


Nenhum comentário:

Postar um comentário